Experiencias interpretativas

Una de las cosas que más me llama la atención en el arte del danzar, de mover a gusto el cuerpo como se plazca, es el intérprete, el que sostiene el movimiento, ese ser que se permite a si mismo que la danza transcurra, quien se transforma y se permite vivir experiencias nuevas. En el periodo que he trabajado con artes escénicas (teatrodanza- performance) he tomado conciencia de varias conductas que realizo en favor de la actividad de interpretar ideas, conceptos o sensaciones con el cuerpo y todas sus facultades expresivas. Por ejemplo pongo una atención gustosa en aumentar el nivel de percepción del presente, es decir, agudizar de sobremanera los receptores sensoriales como la audición, la vista, el tacto, el olfato que nos permiten comprender y sentir de alguna manera el mundo que se habita ya que ese presente es el lugar y tiempo donde la realidad se puede transformar.