Yumbel: cuando los muertos vuelvan a su tierra
Abstract
La desaparición de personas por motivos políticos debe ser encarado como una práctica genocida, un deliro contra la humanidad, un crimen imprescriptible, identificación de sus actores y el rechazo absoluto de la muerte presumida. La política de desapariciones es un método de tortura que alcanza no sólo a la víctima, sino también a sus familiares. Los países que la practican no podrán alegar injerencia en sus asuntos internos cuando organizaciones internacionales indagaren sobre casos de desapariciones.