Bazan Campos, Domingo2015-05-122015-05-122011Revista de la Academia, no. 16, 2011. p. 123-12707171846http://bibliotecadigital.academia.cl/xmlui/handle/123456789/2887Es cierto que en una política pública debe primar un determinado criterio de universalidad y de focalización, de modo de poder aplicar algunas soluciones generales a problemas particulares y específicos, pero esta lógica ha demostrado ser indolente y superficial frente a la propia realidad social (omitiendo la cultura escolar, por ejemplo); máxime, si hemos invilizado desde el Estado el papel de la reflexión pegagógica (y de todo aquello "no estrictamente científico") en la formación de profesores. Este es un absurdo intolerable.esPIÑERA ECHEÑIQUE, SEBASTIÁNEDUCACIÓNPOLÍTICA GUBERNAMENTALPOLÍTICAS PÚBLICASEducación : entre la ficción, la burla y la ignoranciaArticle